Regina Gutiérrez
La falta de oficio del titular de la Secretaría de Gobierno (Sego), Jesús Romero y sus subsecretarios, para atender las demandas sociales de las comunidades oaxaqueñas, ha provocado que el estado enfrente conflictos que han derivado en masacres y en actos violentos contra la ciudadanía.
Este martes, habitantes de Santo Domingo Teojomulco, arribaron a la capital para protestar de manera violenta, causaron destrozos en propiedad ajena y agredieron de manera salvaje a ciudadanos que se cruzaron a su paso, sin que la autoridad interviniera para frenarlos.
Durante más de ocho horas, los manifestantes mantuvieron cercados los complejos de Ciudad Administrativa y Ciudad Judicial, durante los cuales destrozaron autos, golpearon a ciudadanos, quemaron llanta y basura, cerraron la circulación vehicular, robaron pertenencias de automovilistas y secuestraron a trabajadores de Gobierno, todo con total impunidad.
En redes sociales, la ciudadanía exigía la intervención de la Policía Estatal o de la Guardia Nacional, sin embargo, el auxilio nunca llegó para evitar “reprimirlos”, como se mencionó desde Palacio de Gobierno, mientras los inconformes se vanagloriaban de sus desmanes, humillando a “negociadores” de Romero López que nunca asomó la cabeza fuera de su oficina.
Mientras, quienes fueron blanco de las agresiones de los serranos, hasta altas horas de la noche permanecían en la incertidumbre de no saber a quien o a donde dirigirse, para exigir el pago de los daños a sus propiedades ya que muchos autos presentaban averías de consideración.
Mujeres y hombres que fueron agredidos con golpes recibieron atención médica, además de ser respaldados por el Sindicato de Trabajadores de los Poderes del Estado e Instituciones Descentralizadas de Carácter Estatal de Oaxaca (STPEIDCEO), quien mediante un comunicado exigió garantizar la seguridad e integridad de sus agremiados y pidió aplicar a ley a los agresores.
Sin embargo, en el Hospital Civil permanecen dos personas con heridas graves, el conductor de una camioneta que, en su intento de huir de la violencia, fue alcanzado por piedras y machetazos, además de ser bajado de su auto a puñetazos y patadas; y una mujer que en el mismo incidente cayó de una moto, fracturándose ambas piernas.
Hasta la noche de ayer, ninguna de las personas que sufrieron pérdidas materiales, ni los que fueron agredidos de manera física, habían sido contactadas por alguna autoridad, por lo que exigieron saber, quien se haría cargo de la reparación del daño, ante la negligencia de la Sego para atender la situación.