Redacción
Con el cinismo que caracteriza a los funcionarios de la “primavera oaxaqueña”, el coordinador de delegados de paz, Donato Vargas Jiménez, ahora dice no conocer a la activista Sandra Domínguez Martínez, quien hasta la fecha mantiene una denuncia contra él por crear chats misóginos. Ahora, la mujer lleva días desaparecida.
En su acostumbrada conferencia de prensa semanal, en donde la encomienda es tratar de justificar la ineficiencia de la mesa de seguridad, Vargas Jiménez no pudo evadir la pregunta sobre la desaparición de la abogada, señalando que el tema de los chats por el que fue denunciado es “grilla política”.
Tratando de controlar su nerviosismo y su enojo, argumentó que no hay una denuncia formal contra lo dicho por Domínguez Martínez, dijo que él solo conocía a la denunciante por nombre y fue hasta que salió a la luz el tema de los chats XXX, cuando tuvo comunicación con ella.
“Me habló y me dijo: paisano me malinformaron, me dijeron que tú creaste un grupo de WhatsApp, Sierra XXX, tenemos que platicar, hasta entonces nos conocimos, no tengo nada en contra de ella, siempre se tomó como un tema político, yo así lo percibí y deseo que aparezca con vida”.
Sin embargo, a Vargas Jiménez se le olvidó que no es el único señalamiento en su contra, ya que existe otro por violencia de género, corrupción y abuso de autoridad, asimismo, ha sido exhibido totalmente borracho en horas laborales, y se le ha vinculado con grupos delictivos de la región mixe, de donde es originario. Además, los demás funcionarios del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) que también participaron en dicho chat, sí fueron despedidos, mientras él fue protegido por Jesús Romero López.
La abogada y activista Sandra Domínguez Martínez, está reportada como desaparecida desde el pasado 4 de octubre, cuando ella y su pareja viajaban hacia la comunidad de María Lombardo de Caso. De ninguno de los dos se sabe su paradero.