Redacción
Señalan que de tonto solo tiene la cara, porque su habilidad para hacer negocios le han dejado cantidades suficientes para cambiar su estilo de vida. Omar Pérez Benítez, director del Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado de Oaxaca (SOAPA), es otro funcionario corrupto de la “primavera oaxaqueña”.
De acuerdo a una denuncia pública realizada en redes sociales, la dependencia es una bomba de tiempo, ya que los recursos son desviados de manera descarada, el servicio está en su peor época, las colonias no tienen suficiente abastecimiento y la red está a punto de colapsar.
Señalan que uno de los negocios más productivos que está a punto de obtener, es el que mantiene con el presidente del Comisariado de Bienes Comunales de San Agustín, Etla, Aarón Ruiz Rivera, quien a su vez es empleado del área de alcantarillado de la misma Soapa, un cómplice efectivo para el desvío de recursos.
“La negativa del director del director de Soapa, a transparentar el convenio que firmó con su empleado, Aarón Ruiz Rivera, es el temor a que se descubra un incremento de casi 7 millones de pesos por encima del monto tradicional que se han pagado a esa representación comunal”.
Señalan que de acuerdo a datos de la cuenta pública estatal de los años 2023 y 2024, Soapa ha pagado anualmente, en dos ministraciones semestrales, por concepto de montos y subsidios al Comisariado de Bienes Comunales de San Agustín Etla, la cantidad de 3 millones 106 pesos, en 2023 y 3 millones 70 mil pesos, en 2024.
“No se especifican las razones de dicho pago, aunque se supone que el dinero se ocupa para realizar trabajos de conservación del bosque y rehabilitación de canales de distribución de agua a cargo del Comisariado. Sin embargo, con la llegada de un nuevo presidente a ese organismo comunal, que también es empleado de Soapa, en agosto de 2024, se pactó ‘en lo oscurito’ un incremento sustancial en el monto económico que recibirá el Comisariado de Bienes Comunales”.
Y es que, de acuerdo a comentarios de habitantes de San Agustín Etla, municipio regido por usos y costumbres, este 2025 podrían haber llegado a la entrega de 10 millones de pesos al órgano comunal, lo que ha generado desconfianza y sospechas de desvío de recursos por los representantes de Bienes Comunales coludidos con funcionarios de Soapa.
A pesar que desde el inicio de año, un grupo de comuneros ha solicitado a su propio presidente, Aarón Ruiz Rivera, un informe sobre el nuevo convenio firmado con Soapa, este se ha negado sistemáticamente, y también el organismo operador ha rechazado contestar, una y otra vez, las solicitudes de información interpuestas por comuneros y habitantes argumentado que la información ha sido reservada por un plazo de 5 años por razones “de seguridad nacional”.
Y aunque SAOPA dice que “de proporcionarse la información o documentación solicitada, se corre el riesgo de romper la armonía existente entre las partes…”, lo cierto es que hay un ambiente de crispación por la sospecha de que tanto el Comisariado de Bienes Comunales y la Soapa, pretenden engañar al pueblo que solo exige transparencia en los recursos públicos. La armonía ya se quebró.
Esa es la razón por la que jóvenes, personas adultas y hasta adultos mayores –hombres y mujeres– decidieron cerrar las compuertas para la distribución de agua a la ciudad de Oaxaca y todas las noches se congregan en el sitio para resguardar que nadie intente abrirlas hasta que les muestren o les lean el convenio citado.
Esta falta de transparencia, y presunto desvío de recursos, se suma a otras polémicas en la que se ha involucrado el gobierno de Salomón Jara, como la de la adquisición de papel picado o la realización de conciertos musicales con muy desproporcionados montos económicos.
Quizá este sea un nuevo desfalco al erario orquestado por funcionarios de esta administración, que no sería sorpresa. Todo se aclararía si no hubiera tanta resistencia, esta vez, a informar en qué se gasta el dinero público, solo eso, sin embargo, al mismo Salomón Jara se le hace fácil culpar a otros, para tapar a sus funcionarios corruptos.