Redacción
Como una “mafia” que opera en Oaxaca, con funcionarios corruptos que controlan los recursos y las obras públicas, calificó la diputada del Partido del Trabajo (PT), Margarita García García, a la “primavera” de Salomón Jara Cruz, quien ya cumple dos años de administración, sin trabajo visible.
En sesión con integrantes de la Comisión de Transparencia de la Cámara de Diputados federal, señaló que en el estado el nepotismo y el tráfico de influencias es rampante y descarada, como la que realiza Jorge Gandarillas, esposo de la titular de la Auditoría Superior de Oaxaca.
“A este sujeto lo han denunciado y nadie hace nada, utiliza su despacho jurídico para citar a presidentes municipales con el pretexto de capacitarlos en la comprobación de gastos, se les imponen asesores y constructores, ellos ya no saben a quién acudir”.
Pese a ser partidos aliados con el partido en el poder, García García dijo que este esquema de corrupción, afecta gravemente a los municipios y beneficia únicamente a un círculo cercano de funcionarios, a sus familiares y amigos. Pero ante su ineficiencia para gobernar, siguen culpando al pasado.
“Pareciera que seguimos como pericos diciendo del pasado, pero ahora en el presente, en Oaxaca hay una mafia que se ha apoderado del estado, por eso es necesaria una investigación con apoyo de la Auditoría Superior sin titubeos ni protección partidista, que no nos estemos ahí titubeando porque es de Morena o de tal partido”, señaló.
Finalmente exigió que se les brinde voz a los presidentes municipales que han sido presionados por estas redes de corrupción y a asumir con responsabilidad el cargo que se les ha conferido, “porque para eso nos pagan”, subrayó.