*Sin obras reales en dos años de administración de la “primavera oaxaqueña”
Lamentable la situación que se vive en #Oaxaca con el gobierno del morenista Salomón Jara Cruz, que cree que puede tapar el sol con un dedo o que llegó a descubrir el hilo negro de la administración pública.
Basta con ver lo que ocurrió con su cacaraqueado segundo informe de gobierno, no solo porque se tuvo que ir al Istmo a rendirlo, sino por la falta de obras reales a dos años de administración, en donde el nepotismo, la corrupción y la delincuencia, son los factores más predominantes.
Fue en #Juchitán de Zaragoza, donde tienen sentados sus reales Nino Morales y Emilio Montero Pérez, el lugar para que pudieran juntar al menos 10 mil personas, acarreadas como la vieja usanza priista, porque en la capital, las protestas por las mujeres desaparecidas, el aumento de la delincuencia y la #Sección22, no lo hubieran dejado hablar.
Obligados a asistir al informe, los integrantes del gabinete desfilaron cuya pasarela pueblerina, el que más risa causó fue el argentino mandamás de Comunicación Social, quien portaba ridículamente una playera con el rostro de Salomón Jara, desde la pobre vista que se carga dijo en su comunicado que habían asistido al lugar, más de 45 mil personas. Nada más cómico.
Por cierto, que fue tan tedioso el informe, que con un video dio a conocer el supuesto trabajo y luego se dedicó a alabar a su mesías López Obrador, pero lo más gracioso fue que los gritos de “es un honor estar con Salomón” que vociferaron sus aplaudidores, le hicieron creer que de verdad es una copia fiel del macuspano. La mitad de asistentes se fue del lugar cuando apenas iba a la mitad de su discurso.
En la capital, la pantalla y las sillas dispuestas para que burócratas escucharan el informe en el Zócalo, salieron volando cuando se dijo que la marcha de la Sección 22 arribaba al lugar y para evitar una confrontación, mejor se fueron. Qué necesidad de arriesgarlos si las protestas estaban anunciadas. El punto era gastar dinero del erario para el lucimiento del mandatario.
Jara Cruz habló gobernabilidad, estabilidad y cohesión social, de combate a la corrupción y de la recuperación de inmuebles que ahora serán utilizados por sus funcionarios, dijo que ahora tienen un manejo “transparente” de los recursos públicos y que Oaxaca es el quinto estado más seguro del país. Nadie le creyó.
Los números dados por Jara Cruz son intrascendentes, la ciudadanía no ve con buenos ojos que proteja en su gobierno a misóginos, violentadores y deudores alimentarios, a criminales inmiscuidos en desaparición de mujeres y a grupos criminales apadrinados por secretarios que tienen a la ciudad en jaque.
Las cuentas que el ahora gobernador tendrá que rendir le vendrán más adelante. Ahora está disfrutando las mieles del poder igual que su secretario de gobierno, a quienes les cae como anillo al dedo aquel dicho que reza “el que nunca ha tenido y llega a tener, loco se quiere volver”.
Por cierto, que los recursos invertidos en algunos de los personajes de la administración jarista se notan inmediatamente, dejando de lado a la secretaria de Turismo cuyas facturas por sus gustos son exorbitantes, también se le ha visto bastante cambiada a la presidenta Honoraria del Sistema Estatal DIF, Irma Bolaños Quijano, a quien ya visten mucho mejor. Como recomendación, deberían invertir también en un curso de léxico para don Salomón, porque cuando habla da pena ajena.
Hasta la próxima.