Redacción
Ante el aumento de la violencia en la zona del Istmo de Tehuantepec y el fracaso de los operativos de seguridad implementados por la “primavera oaxaqueña”, autoridades de la región están tomando medidas drásticas para salvaguardar la seguridad de los habitantes.
Tras semanas en que se han vertido en redes sociales una serie de amenazas, presuntamente emitidas por grupos delincuenciales que buscan el control de la zona por medio del terror y la violencia, trasportistas han decidido suspender sus servicios, trastornando las actividades de cientos de habitantes.
Asimismo, autoridades educativas han decidido suspender actividades en diversas instituciones, argumentando que el objetivo de esto es “proteger la integridad física y emocional de los estudiantes”, por lo que, escuelas de educación básica han cerrado sus puertas hasta nuevo aviso.
Este martes, autoridades municipales de la Agencia Palomares, localidad ubicada en Matías Romero, mediante un comunicado informaron que “debido a los acontecimientos de los últimos días, se suspenden las actividades cívicas a conmemorar los días 15 y 16 de septiembre, así como las clases en las escuelas de la localidad, de manera temporal”.
Pese a la incertidumbre que se vive en la región, el gobierno de Salomón Jara Cruz ha minimizado los sucesos señalando que “ha habido una serie de noticias falsas que solo buscan generar incertidumbre en la población, pero que se trabaja de manera puntual y oportuna para garantizar la seguridad y protección de las personas”.
Sin embargo, sus cacaraqueados operativos de seguridad no han servido de nada, ya que la población sigue viviendo diariamente los actos de violencia ejercido por grupos de la delincuencia organizada que han sentado sus reales en esta región y que mantienen en vilo su tranquilidad, por lo que exigen un trabajo real de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).