Redacción
Luego de darse a conocer la desaparición de algunas dependencias y oficinas del sector centralizado que integraban el Gobierno del Estado, so pretexto de reducir el gasto corriente y poder redistribuir los dineros públicos a proyectos “prioritarios”, ya trascienden los nuevos puestos de funcionarios que se quedaron sin oficina.
Y es que luego de hacer “berrinche” por la eliminación de la Jefatura de la Gubernatura, de donde era titular, el exluchador social, Flavio Sosa Villavicencio, volvió a estar en el escenario, cuando se mencionó que le darían un premio de consolación, ya que también fue corrido de la regiduría de San Bartolo Coyotepec.
De acuerdo a fuentes del Gobierno Federal, Sosa Villavicencio sería nombrado como nuevo delegado del IMSS Bienestar en Oaxaca, un trascendido que dejó a más de uno con el ojo cuadrado, pues no se imaginan al llamado “Demonio de Tasmania”, como funcionario federal.
Presuntamente el anuncio lo daría este jueves el titular del IMSS, Zoé Robledo, situación que marcaría un precedente en Oaxaca, de que un personaje señalado como incendiario, corrupto y arribista, llegara primero como funcionario de la “primavera oaxaqueña” y posteriormente como funcionario federal, un premio difícil de creer o el pago por algunos “favores especiales”.