Redacción
Solo siete meses aguantó el morenista Salomón Jara Cruz, el compromiso de estar al frente de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) y este lunes, durante la “mañanera” en Palacio Nacional, entregó la estafeta al gobernador de Yucatán, Mauricio Vila, quien fungía como vicepresidente.
Jara Cruz había sido elegido para el periodo 2023-2024, durante la LXII Reunión Extraordinaria de la Conago, realizada en Querétaro el pasado mes de febrero, a la que asistió el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien hoy aplaudió el cambio en el organismo.
Y es que la abrupta renuncia, deja en entredicho si el gobernante renunció o lo renunciaron ante la falta real de trabajo, ya que tampoco en la Conago ha dado resultados visibles, aunque haya señalado que entrega este órgano “fortalecido y renovado conforme a las necesidades de la ciudadanía mexicana”.
El único logro destacable en estos siete meses, fue la visita de John Kerry a Oaxaca, el 21 de marzo, enviado especial del presidente de Estados Unidos Joe Biden, para abordar el tema del cambio climático. “Fue una reunión histórica, y un intercambio de opiniones y propuestas francas y enriquecedoras”, dijo, fuera de eso, no hubo nada más.
El gobernador de Yucatán Mauricio Vila, conforme al reglamento del organismo, asume durante los próximos tres meses la Presidencia de la Conago, para terminar el mandato de Jara Cruz, a quien el presidente López Obrador ya le había “recomendado” que no descuidara Oaxaca.
Pese a todo, la Conago ya perdió la esencia para lo que fue creada, ya que surgió como manifestación de algunos gobernadores en contra del presidente Vicente Fox, al que cuestionaron su forma de ejercer el poder al amparo del federalismo. Sin embargo, al ser ahora la mayoría de gobernantes de Morena, solo está al servicio del Gobierno Federal.