Redacción
A un año de que hiciera pública una denuncia en contra del coordinador de Delegados de Paz del Gobierno del Estado de Oaxaca, Donato Vargas Jiménez, por violencia física, emocional y económica, la víctima, Martha Aracely Cruz, dio a conocer que teme por su vida ante nuevas amenazas por parte del funcionario.
A través de un video dado a conocer en redes sociales, señaló que días antes de su denuncia, circuló material digital donde se evidenciaban conductas poco éticas de dicho funcionario, junto a otros operadores políticos que se ostentan protegidos por líderes de partidos políticos regionales en Oaxaca.
“Entre todo salió a la luz la existencia de grupos virtuales en whatsapp donde estos operadores, entre ellos Donato Vargas-, compartían fotografías de mujeres indígenas y de sus compañeras de partido donde se hacían comentarios cosificantes sobre sus cuerpos, también denostando las denuncias públicas como la mía y de otras mujeres que han señalado las practicas violentas del mencionado circulo de funcionarios y operadores políticos en la sierra mixe, donde predomina la presencia de mujeres indígenas”.
Señaló que, tras la indignación nacional de mujeres y organizaciones por las amenazas recibidas contra ella y otras mujeres, se iniciaron carpetas de investigación contra estos grupos de acoso por probable trata de personas.
“Pese a estos precedentes sobre las conductas violentas de mi agresor y además de mi denuncia penal ante la Fiscalía de Oaxaca y la denuncia pública contra Donato Vargas, mi testimonio, mi palabra y los rastros de las agresiones sobre mi cuerpo no fueron suficientes para el gobernador de Oaxaca, pues justificó las actitudes de su funcionario público.
“Ahora hay impunidad y protección de parte de la Fiscalía de Oaxaca quien, se niega a proceder contra mi agresor por su cargo y cercanía con el gobernador. Mi vida corre riesgo. El pasado domingo 25 de febrero recibí una llamada de un número de teléfono local de Oaxaca para amenazarme, me llamaba “el tiburón” señalando que sabía cada uno de mis movimientos”.
Sostuvo que a esta amenaza se sumaron varias más. “Quiero manifestar que temo por mi vida, que mi integridad y la de mi familia se encuentra en peligro, por ello dejo en claro: si se atenta contra mi integridad física hago responsable al gobierno de Oaxaca y a mi agresor, pues han actuado en complicidad para continuar con la violencia hacia mi persona”.
Finalmente exigió que la Defensoría de Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca y la Comisión Nacional de Derechos Humanos emitan medidas cautelares urgentes, para que se le otorgue protección para evitar cualquier agresión.